Hace años mamá me enseñó un truquito para comer bien.
Estaba en una época bastante desordenada (y a mil, que raro en mí ;)). Cada vez que agarraba ritmo con los hábitos sanitos pasaba algo y puff... sentía que iba diez casilleros para atrás.
Oki no estaba todo tan mal. Finalmente había agarrado...