Con acidez cada noche.
Con hinchazón después de comer.
Y teniéndo que desabrocharte ese botón.
Con dolor, gases, tránsito lento...
O con esa sensación de pesadez que no sabés explicar del todo, pero sabés que no es normal.
La mayoría de las personas que llegan aquí con temas digestivos ya probó de todo.
Y lo peor: se acostumbraron a vivir con molestias.
O eliminaron tantos alimentos que ahora no saben qué comer sin miedo.
Pero vivir así —adaptando tu vida a cómo reacciona tu panza y siempre con incertidumbre — no debería ser lo normal.
Y no, no es solo el estrés.
Y tampoco es solo la comida.
Es un sistema más complejo, pero que se puede abordar paso a paso con claridad.
Cuando no sabés qué hacer, y te estás sintiendo mal en serio. Es natural probar de todo para estar bien. Pero podemos terminar cayendo en riesgos...
Ya no sabés qué comer sin que te traiga dolores. Terminás eliminando todo tipo de cosa. Y sip, es un riesgo nutricional alto, porque no podés sanar si tu cuerpo no recibe los aportes de macros y micronutrientes que necesita.
Escuchás que “es estrés” y tratás de estar más tranquila y bajar ese cortisol… pero tu cuerpo sigue inflamado, o mejora un tiempito y después puff de vuelta todo en cadena.
Es lógico si estás (muy) frustrada.
Estás haciendo un esfuerzo enorme por estar bien pero no te sentís mejor o capaz que hasta siguen empeorando los síntomas.
Y ni siquiera sabés si vas por buen camino o estás agravando el problema.
O peor aún... empezás a naturalizar sentirte así. Ouch.
Lo más importante es que sepas que hay solución.
Pero tiene que ser tú solución.
Lo que le funciona a otro no necesariamente te va a funcionar a vos.
No se trata de largas listas de prohibidos ni hacerlo igual a tu amiga (o a ese video de tiktok).
Tener un mapa.
Entender qué eliminar y por qué -- en tu caso.
Conocer tu cuerpo y tus límites, para después elegir con confianza.
Descubrir cómo lo emocional influye —pero sin hacerte sentir culpable por no estar modo om todo el día (y sin depender de que lo emocional esté divino para que tu digestión este divina!).
Claridad en qué hábitos de la diaria hacen la diferencia.
Y apoyo para que sostenerlos -- hasta que te sale "solo" en piloto automático!
Pequeños cambios pueden hacer un mundo de diferencia, cuando sabemos en qué enfocarnos.
Van 3 piques que quiero que hagas hoy para encaminarte hacia una salud digestiva más saludable.
Y si estás con ganas de profundizar te súper esperamos en el Taller Chau Temas Digestivos -- reservá tu lugar aquí.
Muchas veces sentimos que algo no está funcionando bien, pero no logramos entender qué ni dónde.
Por eso, lo primero es ubicar tus síntomas. Tener claro cuáles son y si son "altos" o "bajos" te ayuda a llegar a soluciones específicas para vos (sip, en vez de estar perdiendo tiempo y energía en cosas que solo te complican la vida).
TEMAS DIGESTIVOS ALTOS:
TEMAS DIGESTIVOS BAJOS:
Y sip, te puede pasar que tenés síntomas de ambos.
Sea que sufrís de un síntoma o un montón, no temas! No estás sola.
Y lo más importante: podés mejorar estos síntomas, recuperar tu salud digestiva y tu bienestar real.
Nada reemplaza una evaluación médica cuando los síntomas son persistentes.
Una consulta puede ayudarte a descartar causas graves y, sobre todo, a tener una base clara para armar tu estrategia alimentaria.
Lo sé, a veces da pereza ir al médico o incluso como mujeres está estudiado que nos decimos a nosotras mismas "que no importa" o "suavizamos" los síntomas. Nope, nope, nope. Andá al médico y animate a trasmitir lo importante que es para ti cuidarte.
Si afecta tu calidad de vida, es fundamental ver a tu médico y llegar a un diagnóstico y tratamiento claro.
Como vimos, de los riesgos más grandes ante problemas digestivos es eliminar demasiadas cosas, que termina afectándote negativamente para sanar.
Antes de eliminar “todo”, empezá por observar patrones.
¿Qué comidas te caen mal?
¿Cómo influye el estrés o comer apurada?
¿Dormiste bien esa noche?
Abrí unas "Notas" en tu celular y anotá día a día y anotá todo. Tip: Visualizá cuándo lo vas a hacer (sino esto mega útil va a quedar perdido en la idea). Por ejemplo, te conocés y necesitás anotar en el momento? Te viene bien hacerlo siempre antes de dormir? O aprovechar esos ratitos "colgados" en la sala de espera, el bus o en la cola del super? Ahora que ya te viste haciéndolo, adelante!
Tu médico va a estar feliz que ya ya tenés este paso adelantado cuando llegás a consulta. Empezá hoy!
Vení al Taller Gratuito “Chau Temas Digestivos”, junto a la nutricionista Lic. Maren Torheim.
Un taller de 75 mins donde vas a aprender:
✅ Las 3 claves para una buena digestión
✅ Qué NO comer (y por qué)
✅ Un hábito que el 98% hace mal
✅ La herramienta que mejora el 80% de los casos
Además como en todos nuestros talleres se viene...
Sorteo en vivo -- Podés ganarte un Pack TanVerde y el eBook Recetario ProDigestión!
Espacio de preguntas con Maren
Nuestra palabra secreta con sorpresa final
No tenés que eliminar todo.
No tenés que vivir con miedo a lo que comés.
Tampoco tenés que resignarte a convivir con dolor, gases o hinchazón todo el tiempo.
Este taller puede ser tu empuje para dar vuelta la página.
Y empezar a construir un estilo de vida donde tu digestión deje de ser un obstáculo…
y empiece a ser una aliada.
💚 Reservá tu lugar acá
📅 Martes 10 de junio, 12:00 hs (URU/ARG)
Empezá hoy y adueñate de tu salud digestiva.
Ese bienestar que soñás es totalmente posible para vos.
Cariños,
Victoria, Matita y Maren
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